El desarrollo emocional del bebé

Los niños van pasando por diferentes etapas a lo largo de la vida, etapas de llorar, enfadarse, decir que no a todo... Muchas veces no entendemos qué le pasa y por qué cambia tanto, así que hoy os queremos hacer un resumen de las distintas etapas por las que pasa el niño para que le comprendáis un poquito mejor.

PRIMER AÑO: ETAPA ORAL.

En este primer año la boca es fuente de satisfacción, placer y descarga, el movimiento de succión les relaja, por eso tomando el pecho o el bibe se tranquilizan. Esto equivaldría en adultos a comer, beber o fumar para relajarse. 

Cuando les salen los dientes esta etapa oral sigue, y muerden no por agresividad, si no por relacionarse o como gesto de que quieren algo. 

También es muy importante en esta etapa el contacto piel con piel. Se está desarrollando fisicamente y emocionalmente, por lo que necesita a alguien que le coja y le ayude a mantener todas esas emociones que de momento no sabe cómo controlar.

Por último, el niño hasta los 3 meses se piensa que mamá y él son la misma persona, y durante el primer año mamá es su ''yo auxiliar'', el yo que le mantiene y el yo que pone palabras a lo que siente en cada momento, por eso es importante que desde pequeñitos pongamos nombre a lo que sienten, por ejemplo, si lloran, decirles ''te sientes triste'' en vez de ''lloras mucho porque estas cansado''.




18 MESES.

El niño con 18 meses ya no es un bebé, empieza a aparecer la figura del niño y es un gran cambio tanto para él y sus responsabilidades, como para la familia.

Es una etapa destacada por la actividad motórica. El niño empieza a gatear y a andar, por lo que empieza a ver que se puede separar de papá y mamá, y pueden surgir pesadillas nocturnas porque empieza a comprender la sensación de soledad.

2 AÑOS: ETAPA ANAL.

A los dos años el niño pasa por la etapa anal, que se divide en expulsiva y retentiva.

En la etapa expulsiva, el niño toma consciencia de su propio cuerpo y es consciente de cuando se hace pis y caca, aunque haya pañal. A nivel emocional también es una etapa expulsiva en la que el niño tiene muchas rabietas ya que expulsa las emociones en cualquier momento y necesita que su figura de apego le contenga.

A medida que se le va quitando el pañal, comienza la etapa anal retentiva y empieza a conectar con lo que él siente, comprendiendo en qué momento es bueno soltarlo, así pues, igual que comprende que el pis y la caca hay que retenerlos hasta soltarlos en el baño, las emociones hay que retenerlas y soltarlas en una lugar contenido.

También es una etapa en la que habla y anda, no necesita que nadie hable por él, por lo que empieza un proceso de autoafirmación en el que prueba los limites de sus propias capacidades y de los adultos.  Es muy importante cuando están en la etapa del ''no'', escucharles, puesto que es la forma que tienen de comprender que son personas independientes y que tienen unas ideas y opiniones distintas al resto.





DE LOS 3 A LOS 6 AÑOS: ETAPA DE JUEGOS.

Los niños de 3 años comienzan a socializar. Sus relaciones pasan de ser duales (el niño con mamá) a ser relaciones triangulares (el niño, con mamá y papá) en las que el niño ve qué también cuenta la opinión de otros, y que su figura de apego no es exclusiva.

También surgen muchos terrores nocturnos ya que la realidad les va colocando poco a poco en una situación más realista donde no son tan omnipotentes.

Aparece también la parte moral, empiezan a diferenciar lo bueno y lo malo de manera muy sencilla. Por lo que también es importante que tengan normas y limites como horarios, cómo comportarse... para sentirse seguros y saber cómo actuar.




Por último, queremos destacar que en todas estas etapas, el comportamiento de las figuras de apego es muy importante ya que si perdemos la calma cuando ellos también la pierden, el niño se sentirá mucho más inseguro porque pensará que su referente no puede cuidarles bien porque tampoco controla sus emociones.



Comentarios

Entradas populares de este blog

El desarrollo de la comunicación y el lenguaje

Actividades para el sentido propioceptivo de los niños.

Sesión de estimulación sensorial para recién nacidos.